6. Dios se ha revelado a los niños

Transcripción:

Es tiempo de caricias, es tiempo de amar, es tiempo de ver la importancia de nunca olvidar, ha llegado el tiempo.

Por eso COMPANION quiere compartir contigo el pan de Dios para tu alma.

Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y los entendidos y las revelaste a los niños.” - Mateo 11:25

Aunque no lo creas, me encanta escuchar las historias que mis amigas que ya tienen nietos me cuentan sobre ellos. Algunas son extraordinarias. Me llama mucho la atención la espiritualidad que tienen ciertos niños, incluso algunos que vienen de hogares donde no se menciona a Dios de forma intencional. Las percepciones que algunos niños tienen de las cosas espirituales nos dejan con la boca abierta. Ayer estaba hablando de una de esas historias con mi hijo, y me dijo: “No es extraño, Dios ha decidido ocultar algunas cosas de los que se creen muy inteligentes, y se las ha revelado a los niños.” Os confieso que me sorprendió a pesar de que he oído y citado este versículo cientos de veces. ¡Mira que si los niños tienen algo que Dios les ha dado que nosotros no alcanzamos a comprender! Debemos escucharlos más.

Pero, como me dijo mi hijo, la palabra niños aquí también se puede tomar en un sentido figurativo. “Si no os hiciereis como niños, no entraréis en el Reino de los cielos”, dijo Jesús. Dios nos está invitando a venir al Padre como niños indefensos, pero confiados, y recibir de Él lo que los sabios y entendidos de este mundo no pueden entender. Hoy tiene un mensaje para ti, acércate a Él, recuéstate en su regazo y deja que te hable al corazón. Mientras todos los científicos y gobernantes se rompen la cabeza sin saber cómo solucionar el caos en que hemos caído, descansa en los brazos de tu Padre, Él tiene todo el control.

Es tiempo de abrazos, es tiempo del amor, que la esperanza del pequeño llegue al mayor, ¡ha llegado el tiempo!

Y ahora, el abrazo de COMPANION a los mayores en años y jóvenes de corazón.

Tengo que contarte que a veces escucho decir que los que somos mayores nos volvemos como niños, y se dice como si fuera algo malo, pero no lo es. Cuando somos mayores buscamos que Dios nos rodee con sus brazos, empezamos a pensar sin miedo que ya queda menos para encontrarnos cara a cara con Él. Descubrimos que cosas que habíamos leído mil veces en la Palabra, ahora las entendemos y tienen sentido. Así que es una alegría darnos cuenta de que Jesús nos dejaría acercarnos a Él como niños ingenuos, cariñosos, llenos de ternura. Hay que haber vivido mucho y haber luchado durante muchos años para hacernos pequeñitos. Solo así entraremos en el reino de los cielos.

COMPANION te ha ofrecido el abrazo de Dios para hoy.

Asociación COMPANIONComentario